ÁLVARO — Pues la verdad que fue un poco de casualidad, como la gran mayoría de profesionales del sector que conozco, ya que no es una profesión vocacional. Antes de empezar en el sector inmobiliario me dedicaba al mundo audiovisual, pero en plena crisis, año 2014, no había muchas posibilidades de crecimiento y desarrollo en el sector, y tras una conversación con unos amigos me empezó a picar la curiosidad sobre el mundo inmobiliario, vi una oferta de una oficina de RE/MAX, me inscribí y me cogieron.
ALEX — Tras licenciarme en INEF y trabajar en diferentes puestos como profesor de Educación Física, entrenador, socorrista, etc. me incorporé a una multinacional del retail en la que me enganché al mundo de la gestión de equipos y de la empresa. Tras cuatro años en este puesto me entraron las ganas de emprender y aplicar todo lo aprendido en un negocio que me pudiera gustar. Fue ahí cuando le propuse a mi hermano David, que llevaba casi 10 años en el sector inmobiliario en Madrid, a desarrollar un proyecto inmobiliario juntos.
DAVID — Mi llegada al sector inmobiliario en el año 2005 fue puramente por la necesidad de un cambio en mi vida. En aquel entonces vivía en A Coruña, era joyero de profesión y llevaba cinco años trabajando mañana y tarde sentado entre cuatro paredes y sentía que, a pesar de que era una profesión que me encantaba, prestigiosa, bien remunerada y donde había conseguido ascender en la empresa, un día sentí que a aquel trabajo le faltaban dos aspectos fundamentales que no encajaban con mi personalidad: las relaciones personales y la calle. Añoraba poder hablar con la gente, conocer nuevas personas y estar en constante movimiento y no postrado a una silla 8 horas diarias. Un amigo, se había trasladado a Madrid y llevaba un tiempo trabajando en una inmobiliaria muy enfocada al alto standing para clientes francófonos y me comentó que estaban buscando personal. Así que no tarde mucho en decirle que el puesto me interesaba, ya que quería cambiar de aires y que era un trabajo que encajaba perfectamente con mi forma de ser.
ÁLVARO — Para mí los principales valores son Profesionalidad, ya que buscamos siempre la excelencia profesional, y llevar a esta profesión y trabajo a lo más alto, a la altura de la importancia que tiene, algo que en el mercado inmobiliario Español es difícil de encontrar. Por desgracia hay muy malos profesionales que buscan oportunidad de negocio rápido. Nosotros, por el contrario, primamos más la calidad del servicio que la cantidad.
También destacaría la UNIDAD, ya que como podéis ver en nuestra web o si nos conocéis, somos un equipo muy amplio de profesionales, que la verdad tenemos la suerte de estar muy alineados y juntos luchamos por los intereses de nuestros clientes. La verdad es que somos muy afortunados de tener un equipo con tan buena gente.
La ADAPTABILIDAD, ya que cada caso, cliente y propiedad es un mundo distinto, por lo que es fundamental. Y todos ellos bajo el paraguas de la HONESTIDAD y la TRANSPARENCIA.
ALEX — Todo lo que hacemos en nuestro día a día está basado en dos grandes principios que además hemos procurado plasmar en nuestra imagen como empresa: La profesionalidad y la cercanía. Además, es un proyecto y una profesión de personas, para personas, por lo que nos hemos centrado en desarrollarlo con un equipo unido, responsable, honesto, con capacidad de adaptabilidad y que busque la calidad en todo aquello que realiza.
DAVID — Honestidad. Si debo escoger uno es precisamente este. Trabajamos por y para las personas, tanto para los clientes que contratan nuestros servicios como para el equipo de asesores que forman parte de ÔKAM. Es por ello que la honestidad juega un papel fundamental cuando un cliente deja en tus manos su patrimonio, confiando en que vamos a ofrecerlo al mercado a un precio justo y que vamos a cumplir con sus expectativas del buen hacer de un profesional inmobiliario.
ÁLVARO — Creo que es un mercado con un gran potencial, con una gran capacidad de mejora y desarrollo, que se encuentra en un momento de crecimiento y asentamiento. El mercado ha mejorado en los últimos años de manera notable, pero quizás no tanto como venden los medios de comunicación más sensacionalistas y la política nacional. En el mercado actual lo que sí hace falta es una mayor profesionalización del mismo, ya que está demasiado liberalizado y hay un popurrí de modelos de negocio, intrusismo laboral, mucho oportunista, y todo ello unido a la falta de formación, preparación y organización de la mayoría de empresas y profesionales hace que la imagen del consumidor hacia este sector sea nefasta. Por tanto, tenemos que empezar por formarnos, prepararnos y tener unos valores claros para poder dar un servicio de calidad. Así, poco a poco, la imagen del profesional inmobiliario se irá mejorando en la cabeza del consumidor. Debemos de mirar a EEUU o Canadá, donde un profesional del sector inmobiliario está tan bien considerado, como un médico, juez, abogado, economista… España siempre ha sido un país en el que, por cultura, el mundo inmobiliario ha sido muy importante y atractivo para la mayoría de ciudadanos, por tanto, tenemos que aprovecharlo. Hacer las cosas bien para poder llegar todo lo lejos que este sector puede llegar y sacar su máximo potencial. Creo que también sería bueno que se actualicen y creen leyes para regular el sector, profesión, y que se marquen unos límites de actuación para evitar caer en los errores del pasado.
ALEX — El mundo inmobiliario es algo muy apasionante y que además engancha. Las personas normalmente lo asocian a los inmuebles en sí, su precio, las calidades, etc. pero realmente es un sector de personas que desean realizar una transacción (compra, venta o alquiler) en las que se generan muchas emociones: ilusión, tristeza, alegría… Por todo lo que conlleva un hogar y las vivencias que se generan en torno a él. En España es un sector que no tiene una gran imagen y en parte está algo desprestigiado por la falta de regulación y profesionalización del sector. Cualquiera puede trabajar en el mundo inmobiliario, lo que hace que no siempre se den los mínimos para que el servicio y la imagen que ofrece el asesor inmobiliario a los clientes sea el más óptimo. Creo que ese es uno de los motivos por los que la profesión no ha sido tan reconocida como en otros países.
DAVID — Después de llevar casi 15 años en el sector, puedo decir que es, sin duda, una profesión apasionante para quien disfruta de ello, buscando la satisfacción del cliente por un buen servicio prestado. Por desgracia, es un sector donde aparecen muchos oportunistas cuando el mercado inmobiliario se encuentra en un buen momento, aunque también de personas que, por necesidad, terminan siendo agentes inmobiliarios alguna vez en su vida sin habérselo planteado nunca. Es por ello que los ciclos económicos hacen una limpieza natural cuando la economía se frena y generalmente sobrevivimos aquellos que conseguimos fidelizar a los clientes como recompensa de muchos clientes satisfechos. No obstante, la figura del profesional inmobiliario está bastante desprestigiada por mala praxis, falta de regulación estatal, y falta de formación.
ÁLVARO — Como dije antes, el sector en los últimos años ha mejorado de manera notable a nivel general, la demanda genérica de propiedades ha aumentado, y por suerte la necesidad de venta en el mercado poco a poco está desapareciendo, lo que hace que los precios se asienten. En La Coruña vamos unos tres años por detrás a otros mercados como el de las grandes ciudades, es cierto que la crisis llego más tarde, pero tarda más en irse y no ha sido tan agresiva como en otros puntos de España. Por tanto, creo que estamos en un momento de afianzamiento ideal para crear una solidez y buena base para el mercado futuro, pero será hacia 2021 cuando empezaremos a notar esa mejora en los precios, que irán creciendo poco a poco, sin llegar a esos incrementos que vivimos en el boom. No obstante, está en manos de todo, y las heridas de la crisis aún están muy verdes, por lo que debemos de ser cautos.
ALEX — Tras una gran crisis como la vivida en este país hace más de 10 años, en las grandes ciudades como Madrid, hemos experimentado un crecimiento continuo tanto en el precio de las viviendas como en el número de transacciones de compraventa en los últimos 4 o 5 años. A su vez, el alquiler ha cogido fuerza en España, generando una gran demanda que, sumado a una oferta reducida (también provocada por la conversión de propiedades de alquiler tradicional a alquiler vacacional) se ha traducido en una subida de hasta el 20% del precio de la renta. En los próximos años creemos que los precios y la compraventa se van a ralentizar en las grandes ciudades, y en las demás provincias, en cambio, continuará el crecimiento durante varios años.
DAVID — Si hablamos del sector inmobiliario en general, podemos decir que llevamos de 3 a 5 años con un aumento progresivo de las transacciones gracias a que las entidades financieras volvieron a ofrecer hipotecas a precios razonables y a conceder, nuevamente, los préstamos a perfiles de compradores medio y medio-bajo a quienes los bancos hasta los años 2013 y 2014 no les daban acceso. No obstante, estamos viendo que en las grandes capitales ya estamos llegando a una ralentización debido a que las propiedades han experimentado una subida de precio, quizás un tanto optimista en relación con la demanda de los compradores. Por lo tanto, esperamos que para el año 2020 en las grandes capitales los precios se estabilicen e, incluso, podrán sufrir un pequeño ajuste a la baja.
ÁLVARO — Empiezas, inicias, emprendes, continuas, o desarrollas una actividad profesional en la que estás respaldado por una marca, equipo y staff con una experiencia y un recorrido que te ayudará a que tus primeros pasos sean mucho más firmes, permitiéndote llegar más lejos. Creo que el hecho de no estar solo, si no integrarte e un equipo donde la sinergia fluye a raudales es la principal ventaja.
ALEX — En un mercado laboral tan difícil y, a veces, no tan bien remunerado, ÔKAM ofrece la posibilidad de desarrollar tu propio negocio inmobiliario con opción de generar grandes ingresos, y lo que es más importante, con total autonomía y gestión de tu tiempo. Esto último atrae a muchas personas que quieren conciliar su vida personal y laboral de una forma más óptima, y no estar “atado” a horarios rígidos y jornadas laborales largas. Todo ello en una compañía que te forma, te acompaña y en la que existe un plan de carrera para poder crecer dentro la propia marca.
DAVID — Pertenecer a ÔKAM son todo ventajas. Tenemos un plan de formación inicial creado para que un asesor disponga de la información necesaria para salir al mercado y conseguir ingresos a corto plazo. Además de estar inicialmente acompañado en todos los procesos del aprendizaje, les ayudamos a diseñar su plan de negocio a nivel empresarial con el fin de que consigan sus objetivos a corto y largo plazo. En ÔKAM, la formación está en constante evolución adaptándose al mercado del momento y a las nuevas tendencias y necesidades del sector.
ÁLVARO — Primero ha de ser una persona honesta y trasparente, con una clara vocación al servicio, buscando el querer dar un trato personalizado y altamente profesional. La formación más técnica o conocimientos del sector lógicamente ayudan y facilitan mucho las cosas, pero lo importante es que sea buena gente y profesional, ya que los conocimientos y experiencia en este sector por suerte se aprende y desde ÔKAM invertimos muchas horas y recursos en que los asesores estén bien formados y preparados para esta profesión. Aparte contamos con un staff y profesionales especializados que nos dan soporte y ayuda en los diferentes ámbitos de nuestro día a día.
ALEX — Es un oficio que tiene más que ver con las relaciones públicas y la vocación de servicio que con “el ladrillo”. Siempre digo que se pueden enseñar los tecnicismos de una profesión, de eso nos encargamos nosotros, pero la pasión por ayudar a las personas, ser servicial, generar confianza y tener “don de gentes”… eso es algo bastante innato y ,desde mi punto de vista, es lo más importante para este negocio.
DAVID — A un asesor inmobiliario le tienen que gustar las relaciones personales, tener habilidades sociales, buena presencia y saber adaptarse tanto a los distintos perfiles de clientes como a las fluctuaciones del mercado. Ser honesto, ambicioso y perseverante. Abierto a nuevos métodos y procesos de trabajo. La tecnología está cada vez más presente en el sector y es prácticamente imprescindible tener unas mínimas nociones básicas al respecto.
ALEX — Nuestro objetivo principal es mejorar cada día la calidad y la cantidad de servicios que ofrecemos a nuestros asesores y, en consecuencia, a nuestro cliente final. En Madrid trabajamos para seguir creciendo por encima del ritmo del mercado como hemos hecho estos últimos cinco años. En la oficina de A Coruña, tras haber cumplido el primer año, esperamos poder consolidarla en la ciudad como la inmobiliaria de referencia por profesionalidad y cercanía. Además, tanto en Madrid como en Coruña estamos totalmente focalizados en tener un equipo más profesional y mejor formado cada día. Esto es lo que nos asegurará a todos los resultados deseados a final de año.
DAVID — Nuestros objetivos son claros. A nivel humano queremos tener un equipo de asesores que se consolide en la empresa y que disfruten de vivir de esta profesión. No es tan importante la cantidad de asesores al que podemos llegar, sino la calidad humana y profesional del equipo y que éste se sienta siempre como parte de esta marca que conformamos todos.
A nivel empresarial queremos crecer en número de delegaciones tanto en Madrid como en A Coruña pero es un objetivo más a largo plazo quizás de cara a 2021. Nuestro presente es seguir mejorando nuestros servicios y ser un referente en el sector en ambas ciudades.
ÁLVARO — Profesionalidad, compromiso, calidad, resultados, frente al volumen de trabajo y cantidad de negocio que quieren abarcar la gran mayoría de inmobiliarias, ya que suelen tener más inmuebles de los que realmente pueden atender. Nosotros buscamos y trabajamos con clientes que realmente están muy comprometidos con la venta o alquiler, que buscan un servicio de calidad, y trato profesional para alcanzar los mejores resultados que permita el mercado. Preferimos tener menos clientes, pero mejor atendidos, y con un servicio en el que se aporte un valor añadido, ya que para poner un cartel, un anuncio en internet y enseñar la vivienda no creo que nos necesiten muchos clientes. Estamos continuamente trabajando en buscar siempre el llegar un paso más lejos, y nuestros datos nos avalan: en una media de poco más de 4 meses vendemos el 80% de la cartera que trabajamos.
ALEX — La principal diferencia, es que nuestros asesores trabajan como máximo 10-15 propiedades a la vez, siendo lo más habitual entre 3-8. Esto significa, que el propietario tiene a un asesor personal que va a invertir tiempo y dedicación total a su propiedad. Además, estará continuamente informado del proceso de comercialización y venta de su propiedad. Desde el primer contacto hasta la notaría todo se realiza de una forma profesional, por lo que el cliente puede tener la total tranquilidad de que todo va a ir bien. Nuestros departamentos de coordinación comercial, jurídico, calidad y financiero, entre otros, se encargan de que todo salga correctamente y de que se consiga el objetivo: que la propiedad se venda al mejor precio posible, en el menor tiempo posible.
DAVID — Profesionalidad y calidad humana. En mi trayectoria profesional mis éxitos han llegado siempre por destacar en esos aspectos. Y, a día de hoy, es lo que prevalece en nuestra empresa. A partir de ahí, la experiencia de los asesores de la empresa, la formación más actualizada, trabajar por y para el cliente para las consecución de sus objetivos, son los aspectos que nos diferencian de la competencia